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Autismo, depresión... ¿una sola causa? 
Cada vez hay más pruebas de que el microbioma intestinal puede influir en el desarrollo neuronal, el comportamiento, la función cognitiva y la aparición de conductas depresivas

Pilates - entrenamiento de fuerza no...
Esta forma de movimiento se conoce desde la década de 1920, y comenzó

El exceso de trabajo es un camino corto hacia los problemas
Cada vez se habla más de la vida sana, de cuidar tu zona física, emocional y espiritual. Hemos oído que es bueno meditar, relajarse y hacer ejercicio. Sabemos que una alimentación sana y un sueño adecuado son esenciales. Sin embargo, hay otra cuestión muy importante y extensa: la higiene mental.
Vivimos en tiempos en los que no es fácil separar nuestra vida privada de nuestro trabajo. Muy a menudo nuestras responsabilidades laborales se cuelan en nuestra casa, en nuestro tiempo de ocio y en nuestra cabeza... incluso por la noche. Cada vez es más evidente que el trabajo domina nuestras vidas y le prestamos la mayor atención. Razón de más para pensar en lo que podría acompañar a esto.

El microcosmos que llevamos dentro: el planeta Gut
Los intestinos son nuestra "interfaz entre los mundos": el exterior, representado por los alimentos, y nuestro interior. Miden entre 8 y 10 metros de largo y la superficie de contacto de la mucosa es de unos 300 m2.

Fomentar la resiliencia en los niños
Lo que comes refuerza tu inmunidad o la perjudica. Un intestino sano es fundamental. La microflora adecuada tiene que estar ahí.

¿Dolor de espalda y de articulaciones? Elegir Pilates
Tras unos ejercicios regulares realizados correctamente, con la debida precisión, podemos sentir el primer alivio en cuanto al dolor de espalda y de otras articulaciones.

Dieta
La dieta debe ser rica en alimentos no procesados, grasas y proteínas saludables y verduras ricas en vitaminas.

Vitamina D: como la buena salud
Los niveles elevados de vitamina D dan lugar a la producción de proteínas que tienen propiedades antibacterianas y virucidas; en pocas palabras, estamos produciendo un antibiótico nosotros mismos. Nuestro sistema inmunitario es capaz de hacer frente a la tuberculosis.
